• Hay un momento en la vida donde más nos sentimos perdidos con nosotros mismos. Donde no sabemos hacia que dirección movernos, no sabemos que seguir en la vida. Un momento donde hay millones de caminos en diferentes direcciones y nosotros sólo sabemos dudar, en vez de finalmente elegir uno. Un grupo de chicos, se encuentra al inicio de ese camino, perdidos sin saber realmente donde ir. Los brazos cálidos de la secundaria ya son brazos que no les corresponden y ahora se dirigen hacia el difícil momento de la verdad. Donde dejarán toda aquella niñez para caminar hacia la madurez. Varios se perderán, no seguirán sus ideales, quedaran en el camino buscando encontrarse a si mismos, buscándose. Muchos encontrarán un camino, pocas veces será el correcto, pocas veces confiaran en las personas correctas que fingen ser amables ante ellos. Pocas veces verán la pared al momento de golpearse. Por que es la hora del cambio, y el cambio siempre es duro.
En Coast Ranges, todos los alumnos que se han graduado en la secundaria Ranges, tienen algo en común. No es el lugar, no es la amistad, no es el haber terminado el colegio, sino una playa. Una playa donde todos han crecido, algunos han vivido frente, otros han tenido un espacio privado, otros han pasado mas tiempo durmiendo en la arena que en sus propias camas, pero todos los adolescentes han estado en aquella playa. Esa que consideran parte de ellos mismos y que los une. Esa misma playa que la noche de la graduación se tiñó de oscura al convertirse en la escena del accidente de una de las compañeras mas amadas.
Sophie Calvin perdió la vida esa noche de festejos, en un simple accidente. Todos lo recordaron y explicaron como fue. Muchos se quedaron en silencio pero todos entraron en razón, nadie podía odiarla, era la persona más dulce y adorable de Ranges. El caso se cerró como accidente, tal como fue, pero algo cambió en la viste del alcalde. Enfurecido con la fiesta, decidió cerrar la playa para siempre.
Queriendo convertirla en algo diferente, cerrando el único lugar donde los chicos podían ser felices. Todos los egresados de ese año, a pesar de sus diferencias y odios, a pesar de haber un grupo que odiaba esa playa, se juntaron e intentaron detenerlos, pero sólo lograron un tiempo plazo.
Un verano.
El plazo terminaría cuando el verano se fuera y todos comenzaran las clases de nuevo. Una vez más algo los unía a todos, no sólo el comienzo de algo nuevo, de un camino hacia la universidad o al trabajo, sino a permanecer juntos… un solo verano.
Lun Mayo 05, 2014 9:17 am por Cristina Lawniet
